Desde hace muchos siglos, los seres humanos nos dimos cuenta que nuestra especie está compuesta de criaturas frágiles, que nos podemos derrumbar con toda facilidad frente a las adversidades de la vida. Sabemos que nacemos inacabados en comparación con gran cantidad de especies animales y poco a poco nos hemos ido dando cuenta, a lo largo de muchos siglos, que sólo podemos reconstruirnos hasta obtener todas nuestras capacidades humanas mediante el desarrollo de rituales, la adquisición de conocimientos, la reflexión sobre todos ellos y el proceso de mejoramiento de lo adquirido, que ha conducido al desarrollo de nuestros métodos de crecimiento cultural que son las ciencias, las filosofías, las artes y las religiones.